

Del siglo X hasta la Guerra de los Cien Años
Durante los siglos X y XI, un pequeño monasterio de religiosas benedictanas fue edificado en el valle en pleno macizo forestal : « Notre-Dame de Bondilhon ». Por motivos de seguridad, las religiosas tuvieron que abandonar su monasterio a fines del siglo XII.
En aquellos tiempos el obispo de Uzès, Guilhem de Vénéjan, atento al peligro de herejía después de la experiencia cátara que les tocó a los estados del Conde de Tolosa, estableció relaciones con la Orden de los Cartujos de San Bruno ; les permitió construir, en 1204, un nuevo monasterio.
Así que, el 10 de febrero de 1204, fue fundado el cuadragésimo primero edificio de la Orden de los Cartujos.
Al principio no fue cosa muy facíl, tanto como en muchos de los demás conventos ; La docena de religiosos que llegaron al bosque de Bondilhon tuvó que desbrozar para que se pudiera vivir en ese valle que se le concedieron. Hoy en día, inmensas bóvedas todavía sostienen una parte de los edificios, permitiendo así un mejor saneamiento. El valle se transformó en una tierras fertiles gracias al labor constante de los cartujos, así que fue llamado « vallis bona », Valbonne.